Dicen que en los tiempos que corren ya no hay que esconder los collares de perro, los látigos ni las máscaras de cuero en el armario, que cualquier señora de su casa puede exhibir el set sobre la cómoda de su habitación. Pero ¿cuánto hay de cierto en esto de que el sadomasoquismo es un fetiche cada vez más popular?
Azotes de mentira para jugar al castigo. Vikavalter Vetta (Getty Images).
Un estudio realizado por la página de contactos eDarling entre solteros alemanes afirma que el 20 por ciento de los encuestados (tanto hombres como mujeres) han tenido alguna que otra experiencia sadomasoquista y que el 31 por ciento de los hombres y el 20 por ciento de las mujeres estarían dispuesto/as a probar algunas de las técnicas ligadas al BDSM que se describen en el best-seller 50 Sombras de Grey.
Al parecer, solo el 5 por ciento de los hombres y el 15 por ciento de las mujeres rechazarían inmediatamente una proposición de sumisión o dominación sexual
¿Será verdad que ya no hay armario para los cultores del sadomaso? ¿Solo en Alemania o también al sur?
Los datos del estudio de eDarling (encuestados 469 solteros de habla alemana) podrían ser leídos sin tanta picardía, porque (aunque sea una verdad de perogrullo) una cosa es lo que uno dice (y fantasea) y otra la que uno lleva a cabo en esta convención llamada realidad.
Fuente: eDarling.
Veamos las cifras que nos ofrecen: el 57 por ciento de los hombres y el 42 por ciento de las mujeres entrevistados aseguran que se irían a la cama la primera noche con una nueva conquista, siempre y cuando se sintieran cómodo/as en dicha situación. Ahora sí, una vez que se sienten cómodas, el 64 por ciento de las mujeres quisieran que su nuevo galán no se reprimiera y exteriorizara todos sus deseos sexuales.
Llamativamente, en el caso de los hombres, este porcentaje es menor (¿no quieren que ella exprese del todo su deseo porque no tienen ganas de cumplirlo o temen algo que no comprendemos?). De hecho, un 52 por ciento de los encuestados opta por erotismo soft en la primera noche, al menos en sus declaraciones públicas.
No sabemos si eDarling ha hecho su encuesta entre sus usuarios, pero cualquiera que haya estado 'afiliado' algún tiempo a los tradicionales sites de búsqueda de pareja (los generalistas Meetic, Badoo o el viejo Match) o cualquier otra web de contactos en internet habrá recopilado su buena ración de ofertas perversitas o masoquistas. Esto no significa que en las páginas de contactos no pueda uno hallar el amor de la vida y, entretanto, dar con cientos de ángeles de la guarda de misioneras costumbres sexuales. Pero, quien más quien menos (chatea), entre búsqueda y filtro, entre guiño y flechazo, es probable que alguna charla en territorio sadomaso también haya degustado.
Fuente: http://blogs.elpais.com
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